martes, 14 de abril de 2009

DIA DE LA II REPUBLICA ESPAÑOLA


Hoy martes 14 de abril conmemoramos el día de la II República Española. Hoy es un día muy especial para todos/as aquellos que hace muchos años lucharon por unos ideales que aún se conservan (democracia participativa, educación laica, libertad de expresión, derechos, igualdad...), que son los que hacen magnánimo a los pueblos. Quiero desde aquí agradecer a todos los republicanos y republicanas asesinados por la sublevación fascista, también a los represaliados durante la dictadura, a todas esas personas de gran calidad humana que no debemos dejar caer en el humillante silencio y olvido todo lo que hicieron a favor de un estado democrático y justo. Si no fuera por ellos, no existiría actualmente ideas de libertad... esta concepción ética de la vida que nos compromete a combatir las miserias y las cadenas que impiden una sociedad justa y libre. A todos los demás, SALUD Y REPUBLICA.

lunes, 13 de abril de 2009

POLITICA, EMPRESA Y SOCIEDAD


Una imagen vale más que mil palabras, no lo ha podido expresar mejor elroto@inicia.es , esto es lo que pretenden hacer con TUSSAM, dejar que muera por inanición y lo más sorprendente es que quienes tienen más interés en que esto ocurra son gente que suelen estar en contra de la eutanasia (paradojas de la vida).
Cuando escucho al gentío pronunciarse en contra de las empresas públicas, con ese tono de convencimiento de que todo lo público es malo y todo lo privado es bueno, lo menos que siento son escalofríos. Como se puede sentenciar de una forma tan rotunda en contra de algo que es de todos, que hay que defender porque es lo único que puede prestar un servicio adecuado a las necesidades de los ciudadanos, que sería de nosotros sin la sanidad, las escuelas, los parques, los bomberos, la limpieza, las playas, los autobuses y el largo etcétera que completa el abanico de los servicios que recibimos los habitantes de cada pueblo y ciudad. Que mentes tan retorcidas son esas que utilizan todas sus energías en desprestigiar los servicios públicos, en querer convencer de lo innecesario de los mismos por los costes tan elevados que supone su mantenimiento. Y es que todo lo quieren ver en clave de beneficios económicos, atrás queda y nada importan los beneficios sociales y de servicio que prestan las empresas públicas. La crítica siempre va dirigida a los trabajadores públicos por su condición, a la vez se le exige más que a ningún otro, se les hace responsable de la marcha de la empresa y los acusan de ser los culpables del déficit económico de las mismas, de lo sobredimensionada que están las plantillas, de los altos sueldos que ganan, de jornadas de trabajado reducidas, se les acusa de todo aquello que pueda suponer un “privilegio” sobre cualquier trabajador de la empresa privada, con ello se persigue el descrédito y el enfrentamiento de los trabajadores públicos y la sociedad y por ende la mala imagen de la empresa. En cambio no se habla de la labor y las responsabilidades de los políticos, tampoco de los directores que los anteriores nombran a dedo para que dirijan las empresas, con sueldos que superan como poco, cuatro veces la media de cualquier trabajador, con contratos blindados, dietas, asesores, con coches oficiales y conductor y aquí otro largo etcétera y estos sueldo y estas condiciones también salen del dinero de los contribuyentes. Estos directivos son los verdaderos responsables de los resultados y servicios que prestan las empresas, son ellos los que tienen las competencias en la organización del trabajo y hacen y deshacen a su antojo, es a ellos a quienes hay que exigirles que hagan bien su trabajo, que no malgasten los recursos económicos y humanos.
Basta ya de mentiras, de manipulaciones, de engaños por parte de los políticos, empresarios y directivos, la gran mayoría de trabajadores sabemos cuáles intereses oscuros les mueven en crear en la sociedad estados de opinión que les favorezcan para conseguir sus objetivos perversos. No ceden en su empeño de continuar minando de una manera insistente, rutinaria, susterfugia, que sea tolerable a través del tiempo. No podemos bajar la guardia ni tolerarlo de ninguna de las maneras, no permitamos que supriman la libertad que supone la garantía de contar con la confianza y el valor de lo público.

jueves, 2 de abril de 2009

Más de lo mismo.

Represión, prepotencia, provocación, imposición, son algunos de entre tantos otros, los estados anímicos que sufre el vicepresidente del consejo de administración y su correligionario el cacique del gerente, se intuye por su manera de actuar que no debieron tener una niñez feliz, tampoco su adolescencia y de mayores continúan aferrados a determinadas actitudes o situaciones (pasadas, presentes o futuras), son por las que les surgen y mantienen los trastornos psicológicos y la desdicha. Son estos apegos o "fijaciones" los que, chocando con la realidad, les producen innecesarias y dolorosas perturbaciones que les amargan la vida y por ello quieren amargársela a los demás. El nombrar a estos dos tipos como responsables de la empresa ha sido el colmo de la habilidad política, seguro que no hay por ahí otros personajes más vanidosos, lenguaraces y embusteros y se han juntado el hambre con las ganas de comer, en ese “totun revolotum” han cogido a los trabajadores de tussam como rehenes para descargar todas sus iras y mala leche, están obsesionados en hacer vivir a los demás en el más absoluto desconcierto y humillación, solo conocen el rencor del ordeno y mando y es a lo que dedican (utilizando su mismo lenguaje) sus “sagradas vidas”, estoy convencido de que la “sagrada orden” se lo agradecerá, pero nadie es eterno, ellos, esta gente de tan baja moral afortunadamente son mas efímeros que el resto de los mortales, el problema es ¿Quién o como se va a resarcir el daño que están haciendo?.
A quien quiere engañar este tipo, vicepresidente de Tussam, pertrechado por su inseparable gerente, haciendo de nuevo declaraciones en la “prensa amiga” de lo mal que va la empresa económicamente, de la inviabilidad en que se encuentra por la deuda acumulada, haciendo a los trabajadores responsables de esta situación, si, a esos mismos que acusa de chantaje en toda regla por ejercer el derecho de huelga para evitar el enchufe de los amarillos, a los que hace causantes de que por mantener el conflicto hemos perjudicado los intereses económicos de la empresa, a los autores de la disminución de la calidad del servicio, podía seguir pero la lista se haría interminable, como interminable es la falta de principios, de valores, de respeto, de este individuo a todo y con todos. Miente y manipula más que habla, no ha habido un cargo público de los que ha ocupado que la cuenta de resultados difieran de lo que está ocurriendo y estamos sufriendo en Tussam, ahí están las hemerotecas para demostrarlo, la trayectoria política de este personaje pasara a sustituir en la historia a la de Atila, el rey de los hunos que se le recuerda como el paradigma de la crueldad y la rapiña. Pero que el árbol no nos impida ver el bosque, detrás de este “usuario de la línea 23” hay un equipo de personajes tan siniestros y responsables como él en todo lo acontecido y en lo que te rondare morena, gente de la misma calaña, dirigentes políticos y directivos mezquinos, subnormales intelectuales, cínicos sin escrúpulos apoyados por ciertos sindicatos absolutamente entregados a la estrategia de cuanto peor mejor. Ese entreguismo desmedido que hacen algunos sindicatos no quedara impune. Ese claudicadísimo absolutamente falto de valores democráticos y de izquierdas, continúo y sin condiciones de estos sindicatos a una dirección de la empresa sin capacidad demostrada tanto para la negociación como para la gestión, no se entiende ni se justifica de ninguna de las maneras. El ninguneo al que han tenido sometido tantos años a los trabajadores de esta empresa es lo que buscan y lo único que saben hacer, con ello, unos y otros insultan la inteligencia de la mayoría de los trabajadores. El hecho de que ellos no tengan dignidad y que sean cobardes, que se comporten como buitres, que no distingan entre lo legal y lo justo y que se comporten como los dictadores, suplantando la voluntad del pueblo significa que se merecen el mayor de los desprecios por fascistas y reaccionarios.